Promulgan la nueva Ley de Alquileres: conocé los cambios más importantes
El Gobierno Nacional promulgó la nueva Ley de Alquileres a través del del Decreto 533/2023 publicado en el Boletín Oficial. Con esta norma el gobierno intentará paliar la crisis habitacional que afecta a más de seis millones de inquilinos en todo el país.
La reforma de la Ley de Alquileres fue aprobada con 128 votos a favor y 114 en contra en la Cámara de Diputados y una de las principales novedades es la prohibición del cobro de alquileres en dólares, una práctica que estaba permitida en la ley anterior.
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La actualización de los alquileres también experimenta cambios significativos. A diferencia de la ley anterior que permitía un único ajuste anual, la reforma establece que las actualizaciones se llevarán a cabo cada seis meses. Para calcular estos ajustes, se utilizará el coeficiente "Casa Propia," basado en el promedio de la variación salarial anual y el promedio de la inflación en el mismo período. Este coeficiente promueve una mayor estabilidad en la actualización de los alquileres y evita sobresaltos en la evolución de los salarios.
La nueva normativa exige que los precios de los alquileres se expresen en pesos argentinos, prohibiendo mencionar cualquier otra moneda en la publicidad de propiedades para alquilar.
Un ejemplo ilustra cómo funciona el nuevo sistema de actualización. Un inquilino que pagaba $100,000 desde mayo de 2023 deberá consultar el índice "Casa Propia" en el sitio web del Ministerio de Desarrollo Territorial y Hábitat, multiplicar los últimos seis valores del índice y luego multiplicar el resultado por los $100,000. Esto determinará un alquiler de aproximadamente $139,000 durante seis meses.
En comparación con el método de ajuste anterior, el "Índice de Contrato de Locación" (ICL), que se aplicaba cada 6 meses, el nuevo sistema de ajuste resulta en un alquiler aproximadamente un 11.5% más económico para el inquilino. Sin embargo, bajo la ley anterior, el ajuste se realizaba cada 12 meses.
El impacto a largo plazo dependerá de las variaciones en los precios y los salarios, así como de los índices de ajuste. En el primer año, el nuevo sistema puede resultar en un mayor gasto, pero a partir del segundo año, probablemente sea más ventajoso para los inquilinos.
Con información de Ámbito Financiero