Mendoza puso en funcionamiento a pleno la obra de energía más importante de los últimos tiempos
Mendoza puso en funcionamiento la obra de energía eléctrica más importante de los últimos tiempos: la Línea de Alta Tensión Cruz de Piedra, un tendido de 22 kilómetros de doble terna de 220 KV que aportará estabilidad a la red y permitirá que se puedan ejecutar grandes inversiones en energías limpias, como la solar, con cero emisiones.
Mendoza ha incrementado 11% la generación de energía fotovoltaica e hidroeléctrica
El Gobernador Alfredo Cornejo; la ministra de Energía y Ambiente, Jimena Latorre, y el director general de Distrocuyo, Edgardo Fonoll, fueron los encargados de anunciar que ya funciona a pleno, gracias a la determinación del Gobierno de Mendoza, a las tareas de planificación de la Empresa Mendocina de Energía (Emesa) y al trabajo coordinado por Fopiatzad (Ley 8986), Distrocuyo y Transener. Esta línea fue planificada hace más de cuatro décadas, pero por diversas razones no se concretaba.
Otro dato importante de destacar es que, hasta su funcionamiento pleno, el sistema eléctrico provincial tenía instalados 1.600 megavatios de potencia total. Con este tendido se duplicará la capacidad, lo que dará mejor respuesta y operatividad frente a picos de demanda, fallas del sistema de generación en Mendoza y en provincias vecinas como San Juan.
Por su parte, director general de Distrocuyo Fonol comentó que este proyecto ya está funcionando desde el sábado a las 10.42. Se encuentra transportando energía y está haciendo que el sistema sea más eficiente, limpio, seguro, confiable, y señaló que la infraestructura ya está disponible para las nuevas inversiones.
Innovación tecnológica y los impactos de la obra
El director de Distrocuyo Fonoll se mostró visiblemente emocionado al decir que "estoy muy contento personalmente, como Distrocuyo y como mendocino, de poder inaugurar este proyecto que tiene una historia de más de 40 años". Aseguró además que gracias al esfuerzo de numerosas personas e instituciones han logrado llegar hasta este hito que "claramente es un punto de quiebre para el sistema eléctrico de la provincia de Mendoza y partirán de aquí muchas oportunidades, ya que el proyecto en sí es una línea de 220 kilovolts con ampliaciones de las dos estaciones transformadoras Cruz de Piedra y Gran Mendoza, con una impronta muy importante en lo que hace a la tecnología".
Además, hizo especial mención de la importante innovación tecnológica y algunos servicios digitales que permitirán realizar monitoreos, inclusive, de la capacidad dinámica de la línea. "Es uno de los primeros proyectos en el país que tiene y va a tener esa tecnología a disposición, por lo cual tiene múltiples impactos", dijo, y mencionó tres: el primero es que este proyecto da un enorme aporte a la confiabilidad, seguridad y calidad de servicio eléctrico de Mendoza y de la región, aportando la posibilidad de que los flujos de potencia se muevan con libertad por el sistema nacional.
En cuanto al segundo punto, lo calificó como "trascendente" con la eficiencia. "Cuando uno incorpora un proyecto de transmisión a la red, automáticamente logra eficiencia, y en este caso particular este proyecto aporta mucha, la cual está en dos campos. El primero, el de mejorar las pérdidas técnicas, significa menos pérdidas en el sistema, menos energía que pagar asociada a las pérdidas, y el segundo es que mejora las condiciones de despacho, al mejorar podemos tener un despacho no solo más económico sino también más eficiente y limpio".
Seguiendo con su línea del discuros, el director de Distrocuyo sostuvo que el tercer impacto es el más importante de todos y habilita dos proyectos: la incorporación de nuevas instalaciones transformadoras que permitan acercar los beneficios del sistema de transporte hacia la demanda y la concentración en Mendoza de aproximadamente 700 megavatios de energías renovables en los próximos dos años. "Acá hay tres proyectos muy fuertes que están presentes, uno es Mendoza Norte, el otro es Capiz en 220 kilovolts y el otro es la apertura de una línea de 132 en el Sur en el Parque Industrial San Rafael", sostuvo.
Fonoll también puso el foco en un servicio de mejor calidad que servirá para atraer diferentes inversiones. "Este proyecto habilita a que toda Mendoza en su conjunto se vea beneficiado con mayor cantidad de energía disponible. Eso nos permite no solo acercarnos a los usuarios brindándoles mejor calidad y seguridad, sino también dotar a la infraestructura eléctrica de mejores condiciones para que se conecte una nueva demanda, una demanda industrial para atraer inversiones nacionales e internacionales hacia el futuro".
Fonoll comentó que este proyecto ya está funcionando desde el sábado a las 10.42, transportando energía, y está haciendo que el sistema sea más eficiente, más limpio, más seguro, más confiable, y la infraestructura ya está disponible para las nuevas inversiones.
Cabe recordar que las provincias de Mendoza y San Juan se vinculan eléctricamente con el Sistema Nacional en dos puntos: Estación Transformadora (ET) Gran Mendoza y ET Río Diamante. En el primer punto, trascendental para esta obra, la conexión eléctrica se realiza a través de una doble terna de 220 KV, entre la ET Gran Mendoza y ET Cruz de Piedra.
Esta obra evitará un colapso del sistema para la provincia de Mendoza, ya que cubre los picos de demanda en verano y en invierno. Además, la concreción de Cruz de Piedra permitirá instalar en un futuro dos nuevas ET en Mendoza Norte y en Valle de Uco, aportando mayor potencia al sistema.
Cuatro décadas de esperaLa Línea de Alta Tensión Cruz de Piedra-Gran Mendoza comenzó a planificarse hace 40 años, cuando todavía existía Agua y Energía SE.
La Empresa Mendocina de Energía (Emesa), conjuntamente con el Fondo Fiduciario del Plan de Infraestructura Eléctrica de Alta Tensión, Zonas Aisladas y Zonas a Desarrollar (Fopiatzad), a pedido del Gobierno de Mendoza, reflotó el proyecto para mejorar el transporte y la distribución ante la creciente demanda.
Esta obra implicó una inversión de U$S20 millones, que el Gobierno de la provincia financió a través del Fopiatzad.
Se construyó con 55 torres de acero cuya altura oscila entre 45 y 55 metros y sistema de doble cadena en "v", lo que baja la afectación a los propietarios de los terrenos por donde pasa la línea y reduce el ancho de la franja de afectación (servidumbre).
Beneficios
- Respuesta a la demanda creciente del área durante picos de verano e invierno, ante insuficiencias de la generación local por baja hidroelectricidad o problemas en la Central Térmica Mendoza (CTM.) Actualmente, el hecho de no contar con esta línea produce importantes cortes de luz.
- Mayor seguridad, calidad y confiabilidad del sistema, capitalizando la red de Alta Tensión (AT), la cual se encontraba en riesgo de colapso hace tiempo.
- Conformación de doble anillo en Cuyo, que aumenta el límite de intercambio con el SADI y mejora la performance de la red: reduce pérdidas y optimiza la operación del Parque Generador de Mendoza.
- Reducción del despacho de generación local y permite ser menos dependientes de la importación de energía.
- Aumento de la potencia de cortocircuito del Sistema de Mendoza y drástica reducción de las caídas de tensión.
- Tensión constante en anillo de 132 KV de Gran Mendoza y de la barra de la Estación Transformadora Luján de Cuyo.
Datos técnicos
- USD 20,67 millones de monto de obra adjudicada.
- 600 MVA de Capacidad de la línea.
- 142.500 metros de Conductor ACSR 435/55 mm².
- 25.700 metros de conductor OPGW (Cable de Guardia FO).
- 55 estructuras metálicas reticuladas con alturas que oscilan entre 45 y 55 metros.