Quieren hacer casas con ladrillos ecológicos en Mendoza

La empresa Roberto Drazich Desarrollos Inversiones y la arquitecta Gisel Marino trabajan en un proyecto que innova en materiales. Buscan alternativas para zonas vulnerables.


Por Matías Carretero


La empresa Roberto Drazich Desarrollos Inversiones y la arquitecta Gisel Marino presentaron un proyecto sustentable que apunta a utilizar ladrillos desarrollados con botellas de plástico recicladas. La propuesta que nace en Mendoza tiene como fin poder ampliarse a otras zonas vulnerables del país.


Área Tres conoció a fondo el proyecto “Tara”, que en Quechua significa isla. El objetivo de esta gran idea es que llegue menos plástico a las famosas islas de plástico de nuestros mares. “La zona donde vamos a plantear las viviendas es un lugar que sufre bastantes carencias en el departamento de Las Heras, por lo que la mano de obra será del sitio. Nuestra arquitecta Gisel, con vasta experiencia internacional en el tema, está diseñando el modelo de casas sustentables y demás características para que los módulos habitacionales sean accesibles al sector”, detalló Roberto Drazich de la firma que lleva su nombre.


Se apunta a una economía circular que incluya gestiones en materia del cuidado del ambiente a través del reciclado; de desarrollo económico, mediante la construcción de ladrillos ecológicos; y la generación de mano de obra; y también en lo social, gracias a la construcción de casas.


El emprendedor adelantó que están en contacto con la Dirección General de Escuelas para que  los niños ayuden a recolectar botellas para hacer ladrillos con plástico recuperado. Los ladrillos PET los investigó el CONICET en el Centro Experimental de la Vivienda Económica (CEVE, CONICET-AVE) y desarrolló junto a su equipo de colaboradores un proceso para la utilización de plásticos reciclados en ladrillos de polietilen-tereftalato (PET).


“Empezamos a buscar formas de reciclar plástico y relacionarlo con lo que estábamos haciendo. Encontramos que esta opción estaba muy buena y se podía realizar. Es 70% plástico y 30% hormigón, tiene un montón de aristas que estamos atacando. El método es así: el plástico se pica, se muele, se lo mezcla con cemento y se compacta. Es insertado en una prensa con unos moldes y sale el producto correspondiente”, dijo.


Un ladrillo de PET se hace con 20 botellas descartables, lo que resalta la importancia ambiental del proyecto, ya que puede ser una alternativa al ladrillo de barro cocido que consume suelo fértil, usa leña de los bosques y produce contaminación.


Los planos estarán disponibles para quien los deseé. El proyecto que nace en Mendoza tiene como fin poder ampliarse a otras zonas vulnerables del país sembrando conciencia, inclusión social, sustentabilidad y, sobre todo, cubriendo una necesidad real como es la casa propia y digna.


Ambientalista


La arquitecta Gisel Marino explicó que siempre están pensando en cómo poder ser sustentables y cuidar un poco más el medio ambiente, de esta manera surgió la idea de poder realizar esta propuesta.  “Esto de poder convertir el plástico es una solución al problema no solo ecológica sino también el problema habitacional que hay hoy en día a nivel social. El ladrillo tradicional produce mucha contaminación a través de los hornos y las condiciones laborales de la gente que participa de ello es otra problemática”, comentó Marino.


“Lo bueno es que la máquina que realiza este producto la podemos llevar a lugares que lo necesitan. No es un artefacto muy grande, es de fácil traslado lo que permite llevarla de un lugar a otro. Este tipo de proyectos hace a la inclusión social, cuando la gente empieza a trabajar bajo un mismo fin le gusta poder participar e integrarse a la propuesta”, expresó.


La reutilización del material plástico puede ser no solamente para la construcción de viviendas sociales sino también de cualquier otro tipo de edificaciones (que pueden ser galpones, salones de usos múltiples, etcétera). Se pondera el componente socio-productivo y de desarrollo económico, dado que este método alternativo de construcción conlleva la mitad del costo equivalente que el de las obras tradicionales y paralelamente implica el diseño de un plan de negocios para la puesta en mercado de esta tecnología.


Mendoza ya tiene su casa construida con ladrillos PET

Mendoza es la provincia que ya tiene su primera casa construida con ladrillos PET. Específicamente en la localidad de Junín, personal capacitado por miembros investigadores del CONICET llevaron a cabo la construcción de esta vivienda con plástico reciclado hace unos meses atrás.


Desde el año 2016, el Centro Experimental de la Vivienda Económica (CEVE), que depende del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) y de la Asociación de Vivienda Económica (AVE), brindó una intensa capacitación sobre cómo fabricar ladrillos con plástico reciclado a personal del Municipio de Junín.


Este proyecto se logró llevar a cabo gracias al Programa Junín Punto Limpio que desde el año 2012 se encarga de recuperar envases de plástico para su posterior reciclado y obtención de importantes resultados como lo es el de una vivienda familiar.


La casa de PET pertenece a la cooperativa El Vivero y se construyó en El Martillo, distrito de Medrano, la cual cuenta con 56 m2 cubiertos y tiene: cocina comedor, dos dormitorios, baño, calefón solar, luz eléctrica y agua potable.


La desarrolladora viene trabajando fuertemente en la Provincia

Gisel Marino es arquitecta y forma parte de este gran equipo multidisciplinario que es GRAPE, el primer wine coworking del mundo. Desde que obtuvo su título en la Universidad de Mendoza, ha mantenido una búsqueda  de desarrollo personal y profesional.


Ha trabajado durante 6 años en diferentes países como es el caso de Chile, Turquía y Qatar, en proyectos de gran escala, descubriendo nuevos métodos y diferentes materialidades. Hoy en día se encuentra en su país y quiere que Mendoza cuente su historia  es por ello que está incursionando en la arquitectura vitivinícola. Formó parte de trabajos en las bodegas Antigal y Cantu.


Por su parte, Roberto Drazich Desarrollos Inversiones está trabajando en estos proyectos: La Estacada (Mayor Drummond), strip center Solares de Roca (Guaymallén), Villa Adolfina Country Hípico (El Challao), Villa Adolfina (San Martín), Las Chacras  (San Martín) y Alto Los Cipreses  (San Martín), entre otros.