El potencial de Potasio Río Colorado
El proceso de reactivación de la mina de potasio más grande de Latinoamérica, Potasio Río Colorado, continúa a paso firme en la provincia. Mendoza logró recuperar el yacimiento que la empresa brasileña Vale había dejado inactivo en 2013; y luego de arduas negociaciones y acuerdos, tomó posesión plena en 2020. Recuperó así U$S250 millones en activos, un predio de 80.000 hectáreas y una mina capaz de abastecer al mercado interno y exportar sus productos. Este predio cuenta con un aeropuerto en condiciones de funcionar y una capacidad para alojar a unas 3.000 personas.
El primer desafío fue detener la degradación de los activos en Malargüe y planear una estructura de funcionamiento lo más eficiente posible. Para ello, se han realizado tareas de mantenimiento en los equipos de generación de la mina, instalaciones eléctricas, caminos e instalaciones industriales. Además, se mejoró la comunicación en la mina, dotando de señal de celular e internet, se actualizaron inventarios y se rediseñó el sistema de seguridad patrimonial.
El primer desafío fue detener la degradación de los activos en Malargüe y planear una estructura de funcionamiento lo más eficiente posible. Para ello, se han realizado tareas de mantenimiento en los equipos de generación de la mina, instalaciones eléctricas, caminos e instalaciones industriales. Además, se mejoró la comunicación en la mina, dotando de señal de celular e internet, se actualizaron inventarios y se rediseñó el sistema de seguridad patrimonial.
"Todo esto se logró gastando menos del 50% de lo que gastaba la empresa VALE hasta el año 2020, lo cual permitió además invertir en otros proyectos de mejoras e inversiones alternativas como Hierro Indio", destacó Emilio Guiñazú, gerente de Potasio Río Colorado.
El objetivo final es recuperar un emprendimiento que llegó a dar trabajo a más de 6.000 personas, con tres actividades centrales: extracción y exportación de sales de potasio, con alta demanda interna y externa, soda Solvay y servicios.
Este proyecto genera muchas expectativas y un gran impacto para Mendoza, tanto en la economía como en el nivel de actividad de los departamentos del Sur y del resto de la provincia. De esta forma, Potasio Río Colorado promete demandar mano de obra directa durante la construcción, la operación y el desarrollo del yacimiento.
En cuanto a lo que viene, el emprendimiento espera una demanda de al menos 800 empleos directos durante su construcción y unos 400 empleos durante la operación. Estas cifras podrían multiplicarse cuando se agreguen los proveedores de bienes y servicios subcontratados. También se analiza la potencial producción de soda Solvay, materia prima para fabricar vidrio y para producir litio, y la provisión de servicios para industrias y pymes que operan en el sur mendocino.
A los valores de hoy, este proyecto minero prácticamente duplicaría el total de las exportaciones de la provincia y podría aumentar el 50% el total de las exportaciones mineras de Argentina. De esta forma, ayudaría a resolver uno de los problemas más grandes de Argentina, que es el crónico desequilibrio de su balanza comercial y la falta de dólares", anticipó Emilio Guiñazú.
Por las características del proceso, su magnitud y el perfil de los eventuales oferentes, se definió la contratación de un banco de inversión internacional a través de una licitación pública. El banco que resultó adjudicatario es UBS (sociedad suiza de servicios financieros con sede en Zúrich), a través del cual se firmó contrato en 2021 para garantizar la transparencia del proceso y acceder a la mayor cantidad posible de empresas internacionales interesadas en invertir en el proyecto minero mendocino.
A partir de ese momento, se comenzó a trabajar en el diseño del proceso, armado del VDR (base de datos con toda la información de la empresa) y el análisis de mercado.
Actualmente, el Gobierno se encuentra en un proceso de selección y se están analizando los tres inversores que mejor se ajustan a los requerimientos de la provincia. Respecto a la consulta sobre quiénes son los oferentes seleccionados, Guiñazú explicó que "al tratarse de un proceso de M&A (fusiones y adquisiciones) y para buscar atraer empresas internacionales, es necesario proveer un marco de confidencialidad, que les permita participar sin violar sus propios procedimientos de análisis y divulgación de información".
Selección de oferentes
El proceso tiene varias etapas, en cada una de ellas se va profundizando el nivel de información. En la primera etapa, cerrada en octubre del 2022, las empresas analizaron un paquete de información básica que les permitió confirmar su interés en el mismo, se realizó a través de una oferta no vinculante, que es una suerte de precalificación. De estas propuestas, PRC calificó a las más importantes, que pasaron a la segunda etapa.
Luego se comenzó a trabajar en la segunda etapa, que incluye un detallado proceso de Due Diligence con cada una de ellas. Se abrió la información completa, se organizaron las visitas al lugar y se fueron respondiendo las consultas pertinentes.
"Hoy nos encontramos en la tercera etapa, evaluando el conjunto de ofertas y contratos, con el objetivo de hacer una comparación integral de las tres ofertas y determinar la mejor opción", anunció el Gerente de Potasio Río Colorado SAU.
Respecto a los criterios a la hora de selección de la empresa que tomará la posta del proyecto, Guiñazú destacó entre los más importantes: el monto de la inversión, la capacidad de desarrollo, el plazo de ejecución de las obras, el porcentaje de las acciones a ser transferidas, además de los antecedentes y la capacidad económica y financiera del proponente. Esta etapa demorará aproximadamente unos 90 días.
"Se dará prioridad a las propuestas que inicien sus operaciones lo más rápido posible e indudablemente, una vez adjudicado el proyecto, requerirá un proceso de planificación, ingeniería, desarrollo y contratación de proveedores, por lo cual difícilmente se vean grandes avances en el sitio en menos de un año", finalizó Guiñazú y aclaró que estiman un plazo de tres años para iniciar las operaciones.
Escenario internacional favorable
El proyecto Potasio Río Colorado (PRC) también se beneficia por los altos precios internacionales. A corto plazo, los elevados niveles esperados durante 2022 y 2023 potencian los flujos operativos tanto para las principales compañías del sector como para sus accionistas, otorgándoles mejores condiciones financieras para invertir en el proyecto de PRC. A mediano y largo plazo, los precios esperados convalidan la alta viabilidad en el desarrollo del proyecto.
Si bien las reservas de potasio a nivel global son amplias, la capacidad instalada también es alta y llega al 95%. Es poco el poder de expansión mediante proyectos brownfield, es decir, mediante expansiones de plantas existentes, y es necesario abrir nuevas minas.
