Una fábrica de ladrillos ecológicos, elegida por la gente como ejemplo

La fundación cordobesa EcoInclusión, que fabrica ladrillos ecológicos a partir del reciclaje de botellas de plástico, fue seleccionada por el voto del público como representante argentina en el desafío regional Google.org, que se realizará en noviembre en México, con el objetivo de estimular desarrollos que impacten de forma positiva en la sociedad, anunció hoy el […]


La fundación cordobesa EcoInclusión, que fabrica ladrillos ecológicos a partir del reciclaje de botellas de plástico, fue seleccionada por el voto del público como representante argentina en el desafío regional Google.org, que se realizará en noviembre en México, con el objetivo de estimular desarrollos que impacten de forma positiva en la sociedad, anunció hoy el gigante de Internet.


La Fundación EcoInclusión fue seleccionada entre las tres ganadoras nacionales del Desafío Google.org, junto con Señas en Acción y Nilus, acreedoras ya de 350.000 dólares cada una, para hacer realidad sus proyectos de innovación con impacto social.



Al ser seleccionada por el voto del público, la fundación cordobesa competirá en la final regional para ganar un premio adicional de 250.000 dólares para el primer lugar, 150.000 dólares para el segundo y 100.000 dólares para el tercero, informó Google en un comunicado.


EcoInclusión es una organización sin nes de lucro que nació en 2014 en la Ciudad de Alta Gracia, Córdoba, cuándo tres amigos se asociaron en la búsqueda de un proyecto que colmara sus inquietudes de ayuda a la inclusión social y a la ecología local.


Uno de los impulsores de la iniciativa, Fabián Saieg, dialogó con Télam y consideró que EcoInclusión fue elegida "por encima de otros más tecnológicos porque la gente entiende que la basura es un tema que está afectando a todos y que, en lo social, también hay que hacer algo".


Luego de triturar el plástico de 20 botellas, el ladrillo que produce EcoInclusión tiene las mismas medidas y capacidades constructivas que uno de barro cocido tradicional, pero es más liviano, más aislante y su producción no daña el medio ambiente.


Actualmente, el sistema recicla 20 kilos de plástico por hora, genera 20 ladrillos en el mismo tiempo, una producción que se podría llevar hasta los 1000 ladrillos por hora si el equipo gana el premio destinado a la competencia regional de Google.


"En Córdoba ya hay varios prototipos de construcciones realizadas con estos ladrillos y estamos trabajando, por ejemplo, en el edificio de la biblioteca popular de Villa los Aromos", comentó Saieg.


El proyecto, destacan sus creadores, no tiene ningún ánimo de lucro y no tiene costo para las comunidades vulnerables que los utilicen: "Buscamos que el costo de la producción lo abonen o empresas o el mismo Estado", precisó Saeig.


Para participar en la final regional el proyecto de Saieg, Leandro Lima y Leandro Miguez, debió participar en una primera etapa nacional y luego fue el más votado por el público en una compulsa con otras dos iniciativas argentinas.


Estas últimas fueron el proyecto de la organización Señas En Acción denominado Signalo, una aplicación multiplataforma (en versión móvil y web) y gratuita que traduce palabras en voz y texto a lenguaje de señas, al utilizar un personaje animado o avatar que hace de intérprete; y la iniciativa de Wingu llamada Nilus, una plataforma de crowdsourcing (colaboración abierta distribuida) geolocalizada que ubica choferes en zonas donde haya donantes de comida para llevarla al banco de alimentos o comedores comunitarios cercanos.


El jurado de la final regional en la que competirá EcoInclusión está compuesto por Rigoberta Menchú, embajadora de buena voluntad de la Unesco y ganadora del Premio Nobel de la Paz; Gabriel Baracatt, director ejecutivo de Fundación Avina; los artistas Shakira y Diego Luna; la presidenta de Google.org, Jacquelline Fuller; y Adriana Noreña, vicepresidenta de Google para Hispanoamérica.


La edición 2017 de este concurso de Google es el primero en ser lanzado a nivel regional, involucrando a varios países y destinando la mayor cantidad de fondos donados en la historia del Desafío, superando los cinco millones de dólares a nivel global.